cimientos de la iglesia. Luego vinieron los equipos de impacto: grupos de personas que viajarían a otras ciudades cercanas para ayudar a las personas allí a experimentar lo que Dios estaba haciendo aquí. Con el tiempo, Dios comenzó a revelar su plan de discipulado: capacitar a parejas jóvenes para el ministerio dentro de una iglesia local. En 1973, la primera pareja se lanzó directamente al ministerio, ¡y Dios los bendijo! Luego, se comenzaron a plantar iglesias en todo el suroeste de los Estados Unidos, y luego en todo Estados Unidos a medida que los conversos oraban para que se predicara el Evangelio en sus lugares de origen.

En 1978, la primera pareja se plantó en otra nación: Australia; y descubrimos que el Evangelio funcionaba allí, al igual que aquí. Después de eso, se plantaron iglesias en México, Holanda y Alemania y, a medida que llegamos a comprender cada vez más la misión global de Dios, se empezaron a plantar iglesias en todo el mundo. Ahora, se han plantado más de 2.700 iglesias en más de 130 naciones del mundo y el número crece a diario.

Esta iglesia es un producto de esa visión y está trabajando para verla expandida en el corto tiempo que queda antes del regreso de Jesús. Dios nos ha dado una visión para el día en que vivimos. Nuestro mensaje es simple, pero es la piedra angular de toda la verdad. Jesucristo es la única esperanza para la salvación del hombre y eso es cierto para todas las personas en todas las naciones del mundo. En un mundo lleno de sueños vacíos y falsas promesas hay una verdad que se fortalece cada año y es Jesucristo y ¡Él crucificado!